Análisis de la Plástica del Noroeste
Profesor: Roberto Jiménez Rosique
Análisis sobre la Bienal Internacional de Estandartes
Roberto Gutiérrez Galindo
Marta Palau nace en Albesa, Lleida (España) en 1934, y emigra hacia México en 1940. Estudia en la Esmeralda entre los años de 1955 y 1965[1]; su presencia en el noroeste mexicano, particularmente en la región fronteriza, ha sido de mucha importancia porque juega un papel específico para el desarrollo del arte bajacaliforniano al convertirse en una gestora e impulsora del arte en la región cuando lanza y convoca al primer Salón Internacional de Estandartes en el año de 1996 en el Centro Cultural Tijuana con el fin de catapultar esta ciudad hacia la escena artística internacional.
En este trabajo daremos un recorrido por la Bienal Internacional de Estandartes en Tijuana, fundado por la maestra Marta Palau, haciendo hincapié en momentos importantes de la emisión de este evento y en trabajos y artistas destacados dentro de la bienal; y veremos también la evolución de la bienal hasta su última emisión.
El Salón Internacional de Estandartes tuvo tres ediciones: 1996, 1997 y 1998, y a partir del 2000 se convierte en Bienal Internacional de Estandartes; con esto, el evento cobra un peso bastante importante dentro del panorama artístico nacional, e incluso, del internacional al asistir participantes de varios países.
Los artistas utilizan en cada estandarte técnicas y materiales muy variados. Conforme ha avanzado la tecnología se han incorporado la fotografía y la impresión digital, pero sin dejar de lado materiales como el papel kraft, el acrílico, el nylon e incluso materiales orgánicos como bolsas de té. “Normalmente los estandartes suelen ser de papel o de tela, pero los artistas siempre tienen el ingenio para buscar la forma de no caer siempre en lo mismo, es por eso que las técnicas y los materiales cada vez son más variados”[2], comentó la curadora de esta bienal.
Los artistas participan en esta bienal con la libertad de tema, aunque, en cuanto a medidas y requerimientos técnicos se podrían ver limitados ya que la convocatoria establece realizar una pieza de 5 metros de altura por 1.80 de ancho, pintado, intervenido o impreso por ambos lados, con un peso adecuado para el tipo de montaje.
El CECUT ha sido escenario de este evento desde su primera edición como Salón Internacional de Estandartes hasta la última edición en el 2010 como Bienal Internacional de Estandartes; esto ha sido un elemento fundamental para la creación y desarrollo del proyecto, porque el espacio con el que cuenta ayuda al montaje y museografía de los estandartes; las piezas son suspendidas dentro de la sala de exposiciones y esto permite que los espectadores puedan apreciarlos sin las limitantes de una pared o muro y sin reglas museográficas de contemplación.
Marta Palau ha sido la curadora de cada edición; más de trescientos artistas han sido parte de la Bienal Internacional de Estandartes, incluyendo los invitados de esta última edición 2010. En la primera convocatoria participan artistas de Colombia, México, Cuba, República Dominicana, Nicaragua, Venezuela, Uruguay, Paraguay, Puerto Rico, Costa Rica, Brasil, Argentina, Chile, Perú, Bolivia, Estados Unidos y El Salvador; y el poder de convocatoria ha ido creciendo con el paso de los años.
En esta sexta edición participan 39 estandartes, los autores: Carlos Arias, Mely Ávila, Mely Barragán, Álvaro Blancarte, Iván Buenader, Francisco Buelna, Tania Candiani, Enrique Ciapara, Colectivo Oso (Elizabeth Flores y Luis Calvo), Enrique Salvador López García, Pablo Guadiana, Lucero González, Martha Hellion, Jan Hendrix, Beliz Iristay, Rosa Luz Marroquín, Franco Méndez Calvillo, Gerardo Méndez, Emmanuel Nassar, Denis Núñez, Alejandro Osorio, Miguel Pérez Ramos, Sandra Ramos, Gonzalo Rocha, Daniel Ruanova, Siglinde Langholz, Einar y Jamex de la Torre, Fortino Torrentera, Irma Sofía Poeter, Amanda Gutiérrez, Emilia Sandoval, Ana Teresa Fernández, Sung S. Kim, Ana Quiroz, Gerda Gruber, Carla Veliz y Jean von Borstel; inaugurada el Viernes 12 de Noviembre a las 7:00 p.m. en el vestíbulo del Museo de las Californias del Centro Cultural Tijuana.
Lo relevante de esta última edición es que catorce trabajos pertenecen a artistas bajacalifornianos, con lo cual Palau demuestra estar cumpliendo uno de los objetivos principales de este evento: promover la creación de los artistas de la región. La curadora nota una diferencia importante entre los artistas bajacalifornianos que radican en la región y los que viven en alguna otra parte del país:
“Cada vez hay más bajacalifornianos participantes porque en mayor medida están estudiando arte. Muchos de ellos vienen de la Universidad de las Américas, en Puebla. Lo interesante es ver el punto de vista del artista bajacaliforniano que reside aquí y del que reside en el interior del país. Los temas que plantean son distintos; los de aquí están más preocupados por el asunto ecológico y por el paso de la frontera, por ejemplo, y los que vienen de allá tienen otro tipo de preocupaciones”[3] señaló.
Estandartes cuenta en cada convocatoria con tres jurados de talla internacional. Su papel consiste en seleccionar a los ganadores del primero y segundo lugar, y si así lo consideran, pueden otorgar menciones honoríficas. En esta ocasión quienes definirán a los premiados son Santiago Espinoza de los Monteros (México), Yu Yeon Kim (Corea) y Gerardo Mosquera (Cuba)[4]. Los premios son en efectivo y con carácter de adquisición, esto quiere decir que las piezas premiadas pasan a ser propiedad del Centro Cultural Tijuana
En la edición correspondiente a la V Bienal Internacional de Estandartes (ES2008), los artistas ganadores fueron Paulo Climachauska, artista brasileño, por su trabajo denominado Complexo de Alemáo primer lugar por su trabajo proyectado en sus perspectivas arquitectónicas hechas a partir de series de restas aritméticas y Ximena Zomosa de Chile, por su trabajo denominado Welcome 2, segundo lugar[5] trabajo en el que en el que destaca la invisibilidad del cuerpo femenino en la economía global, en torno a la producción de una nueva identidad de feminidad, referida a la provisión de trabajo manual barato. Extraído el 15 de Noviembre del 2011 desde http://laprensa-sandiego.org/archieve/2007/august10-07/Estandartes.htm
El catálogo de la IV Bienal Internacional de Estandartes, reproduce las obras de los 40 artistas participantes en 2006, se cuenta entre ellos a Aldo Guerra, ganador del primer premio con la obra titulada “El Idiota” (autorretrato), Mónica Arreola, ganadora del segundo lugar con “Desinterés Social”, también se incluyen a Gabriel Bolis Terán, Pablo Guadiana y Ana Patricia Rojas, reconocidos con menciones honoríficas por sus respectivos trabajos realizados en estandartes[6]. Extraído el 15 de Noviembre del 2011 desde http://laprensa-sandiego.org/archieve/2007/august10-07/Estandartes.htm.
Si bien, el proyecto ha sido bien aceptado por la comunidad artística y público en general; ha también recibido fuertes críticas al considerarlo como un proyecto personal de Marta Palau, pues afirman que aún se conservan artistas que han participado dos veces o más, invitados personalmente por la curadora. Sin embargo, es imposible negar el alcance y proyección que esta bienal ha logrado, bajo la dirección de Palau; colocando a artistas de mediana trayectoria hacia el panorama artístico internacional y con esto, generando nuevas redes que crean a su vez nuevos proyectos y fomentan el trabajo en equipo, quitándole la etiqueta de “local” o “regional”.
Esta propuesta promueve una perspectiva distinta a proyectos como inSITE, en donde se presentaron instalaciones en el espacio público y privado en la región fronteriza entre Tijuana y San Diego –con esto no quiero restar importancia a inSite- permitiendo al público participar y no simplemente contemplar, sin embargo, el proyecto se limitaba a tratar cuestiones fronterizas entre éstas dos ciudades. Las instalaciones trataban problemáticas de territorio, espacio y subculturas. Por el contrario, La Bienal Internacional de Estandartes permite ver al arte como una mezcolanza de ideas diversas pero en un contexto fronterizo. El aspecto estético sin embargo no se encuentra del olvidado, ya que la disposición en conjunto de las piezas más que las piezas individuales, promueven una libertad contemplativa al permitir al espectador olvidarse por completo de una museografía rígida, ceñida al margen de la línea; estar en esta atmósfera creada por los estandartes genera una experiencia estética guiada por las condiciones de la colocación de todos los estandartes que saturan el espacio compartido y el campo visual individual.
La condición de frontera tal vez manipule la reflexión acerca de las piezas individuales; pero, el carácter internacional del proyecto, permite ampliar perspectiva hacia esta bienal permitiendo generar una nueva postura ante ella y centrándose en visiones menos convencionales que por instantes, hacen olvidarse de la problemática local de Tijuana generando sensaciones humanas compartidas en un espacio que se convierte simplemente en contexto y pretexto.
[1] http://analisisdelaplasticadelnoroesteuabc.blogspot.com/2011/05/marta-palau-y-su-acercamiento-al.html
[2] http://www.conaculta.gob.mx/estados/sala_prensa_detalle.php?id=9240
[3] http://www.conaculta.gob.mx/estados/sala_prensa_detalle.php?id=9240
[4] http://www.conaculta.gob.mx/estados/sala_prensa_detalle.php?id=9240
[5] http://laprensa-sandiego.org/archieve/2008/october24-08/brasileno.102408.htm
[6] http://laprensa-sandiego.org/archieve/2007/august10-07/Estandartes.htm
Así es Roberto, ES ha sido y sigue siendo una gran ventana para que los artistas regionales se muestren ante el mundo junto con otros de mayor raigambre. ES ha sido al igual que inSITE sustancial para la producción contemporánea fronteriza. El acierto de este evento sigue siendo comprometido co su curadora e inventora, Marta Palau, una acción indiscutiblemente valiosa.
ResponderEliminarMtro. Roberto Rosique