jueves, 3 de junio de 2010

El fenómeno del graffiti en Tijuana.




El fenómeno del graffiti en Tijuana.
Por: Vladimir Galaviz Soto.
vladimirgalavizsoto@gmail.com

La pintura en aerosol es un producto muy accesible, lo puede comprar un niño como también puede caer en las manos equivocadas, se encuentra en cualquier ferretería y a un precio bajo.
Debido a la desinformación, a unas personas en la sociedad les hace ruido que en su ciudad se vean marcas con aspecto de garabato ejecutadas con aerosol. Entorno a esto se desata una reacción despectiva por parte de la comunidad y son los jóvenes a quienes los residentes y autoridades señalan, vinculándolos con la drogadicción, criminalizando el graffiti como una actividad vandálica, similar a una plaga, a una enfermedad. Cuando en realidad la inquietud de estos jóvenes es apropiarse espacios para ejecutar ideas creativa, un medio de expresión artística.
Durante las últimas cinco décadas, las sociedades han mantenido contacto visual con consignas, murales y graffiti que pueblan las paredes, residencias, departamentos o puentes. Los lugares más inaccesibles han sido alcanzados por leyendas con pintura en aerosol.
Acierta José Manuel Valenzuela al informar que el graffiti remite a nuevos usos de los espacios públicos que se desarrollaron con la urbanización; involucra una disputa simbólica por la definición del rostro de los espacios, y su connotación legal o ilegal frecuentemente se deriva tan sólo del grupo que lo realiza. El fenómeno graffitero se inserta de manera importante como parte de la crisis de las identidades sociales. Son jóvenes que reconstruyen viejos referentes de identidad y los ponen a funcionar en un nuevo contexto. De esta manera participan en la disputa cotidiana que establece la construcción sociocultural del espacio.[1]
El arte público requiere de una mayor vinculación con los actores cotidianos que habitan en los espacios y sus códigos culturales.
Valenzuela afirma: el artista genera procesos de participación de la comunidad donde se va a ejecutar la obra. Más allá de la dimensión estética y considerando que la obra modificará su paisaje cotidiano, se buscan acuerdos mínimos con quienes, finalmente van a interactuar de manera cotidiana con ella. En el polo opuesto... de la noche a la mañana, la obra “invade” un contexto social donde quienes en él habitan carecen de la mínima información previa... Aquí se produce una importante ruptura de los umbrales público-privado, y el artista traslada el arte público, irrumpiendo en los ámbitos íntimos de los supuestos destinatarios de su obra.[2]
Crecientemente, observamos la penetración de los medios de comunicación en los ámbitos cotidianos y genéricos, así como en las esferas públicas y privadas. Los elementos sistemáticos invaden los espacios íntimos, redefiniendo sus umbrales y los mecanismos de vigilancia como recurso de poder de los sectores dominantes... Asimismo, los procesos electorales (asunto público por excelencia) van desdibujando viejos estilos (con recorridos exhaustivos por el territorio y la comunicación directa con los ciudadanos) fortaleciendo los rasgos publicitarios mercadotécnicos, y las estrategias electorales se centran en el uso de los medios masivos de comunicación, proceso donde el ciudadano-elector deviene audiencia.[3]
Los análisis urbanos de las últimas décadas han enfatizado la dimensión especular de ciudades que “reflejan” la desigualdad social. Las ciudades “proyectan” relaciones sociales que les subyacen. La desigualdad social habita la condición especular de las ciudades, pero sale de ellas, las trasciende. El espacio, al ser construido socialmente, solo es entendible en esa compleja relación dialéctica.[4]
David Joselit, analiza el concepto del espectáculo... puede definirse como la privatización del espacio público debido a la consolidación de los medios masivos como la principal arena de la vida publica... Para acceder al público regional, nacional o transnacional en occidente, uno debe ocupar la plataforma de los medios, ya sea “legítimamente” o a través de intervenciones tipo guerrilla. A lo largo ya de bastante tiempo, los artistas y los críticos han hablado de la “subversión” como el medio para debilitar las técnicas espectaculares del poder.[5]
Antecedentes del graffiti.
Hay quien dice que el graffiti data desde el tiempo de las cavernas con el arte rupestre, con el arte egipcio, etc. En “style wars” película documental dirigida por Tony Silver filmada en el contexto de Nueva York hacia 1982, aborda la cultura del graffiti, el rap y el break dance; hoy es considerada un clásico donde se distinguen los pioneros de las pintas en los vagones de trenes llamados bombings (bombardeos) en Nueva York. Aquí los graffiteros son identificados como writers (escritores) porque eso es lo que hacen, por todas partes, escriben sus nombres que les han otorgado o que ellos han escogido. Pintar graffiti es una vocación para estos jóvenes de Nueva York. Es tradición que se transmite de una generación a la siguiente.
En la estación 149th Street-Grand Concourse, en el Bronx los escritores de graffiti se reunían en lo que ellos llamaban “the writers bench” (el banco de escritores), en la Nueva York de los años 70, el grafitear, rapear y bailar break se convirtieron en las principales expresiones de una nueva subcultura juvenil llamada hip-hop. Graffiti es la palabra escrita que está en el fraseo del rap y la acrobática expresión corporal del breaking.
En 1970, la idea de darse a conocer, no sólo en tu barrio, sino en todas partes, fue concebida por un chico llamado “Taki” que vivía en el 183rd Street de Washington Heights, “Taki 183”. el primer grafitero. Tan pronto como la gente entendió que se trataba de un nombre, se dieron cuenta que “Taki” se volvió famoso.
El graffiti en Tijuana.
En Tijuana se vive la inseguridad a toda hora. Su historia en gran parte se basa en la violencia, los vicios y la emigración. En sus antecedentes esta la cultura del cholo, el tráfico de drogas, de armas y de seres humanos. Su frontera con los Estados Unidos registra un índice elevado de cruces diarios y como consecuencia se comparten las influencias.
El graffiti en Tijuana ha estado presente en la ciudad desde la década de los 80.
Soy de Sinaloa y fui traído a Tijuana por mis padres en el 86 cuando tenía tres años, para el año del 89 nos instalamos en el fraccionamiento El florido. En ese tiempo aquellas áreas (El Mariano Matamoros y el Florido ubicados hacia el sur de la ciudad en la parte trasera del cerro colorado) eran los límites de la ciudad. Aun se hace mala referencia al hablar de estos fraccionamientos.
La Tijuana de fines de los ochentas estaba inmersa en la cultura del cholo, y en el Florido, esta tribu urbana se les veían por en las calles sin pavimentar y los modismos pochos conformando en su vocabulario (la haina, homie, homeboy, ese, vato, etc.), así como su música predilecta “las oldies”. El barrio para los cholos era una cuestión territorial, destacaban los sureños XIII, el XVI, el XVIII, el imperial XXIII y los del XXXIII. En los muros, destacaban estos números romanos y tipografía gótica con leyendas como smile now and cry later, mi vida loca (que también se representaba con tres puntos que forman un triángulo), pocos pero bien locos, personajes con el atuendo del cholo, rostros de mujeres, la virgen de Guadalupe, bardas y torres de la prisión, carros clásicos y del estilo low rider, adornos como telaraña, lagrimas, corazones rotos y atravesados con una flecha, una copa llena de sangre son las primeras manifestaciones de graffiti con las que tuve contacto visual.
Me daba cuenta del movimiento siendo apenas un niño, debía andar uno con cuidado si eras un desconocido eras interceptado a la manera que hacen los policías cuando plantan un reten y la pregunta era ¿Que barrio? después te golpeaban y te quitaban tus pertenencias.
Antigraffiti.
Dice en un panfleto del grupo antigraffiti: “El graffiti actualmente es utilizado por el crimen organizado como una forma segura de comunicación informando el horario de entrega o punto de reunión de vendedores de droga, robo domiciliario a través de símbolos y letras.”
La autoridad sostiene que el graffiti es un delito. De acuerdo con el código penal de Baja California conforme al daño en propiedad ajena, en el artículo 227.- Al que por cualquier medio cause daño, destrucción o deterioro de cosa ajena, se le impondrá de 3 a 6 años de prisión y hasta 300 días de multa ($16,500 pesos).
Artículo 228.- Reformado. Daño equiparado, se equipara al delito de daño en propiedad ajena y se castigará como tal, imponiéndose las penas previstas en el articulo 227; al que sin consentimiento de quien legalmente lo pueda otorgar, altere o modifique la presentación o imagen de bienes muebles o inmuebles, públicos o privados, a través de pintas, escrituras, dibujos o signos de cualquier tipo.
En el tema de la asociación delictuosa, se hace referencia al artículo 237.- Al que de manera permanente tomare participación en una asociación o banda de tres o más personas, organizadas para delinquir, por el solo hecho de ser miembro de la asociación, e independientemente de la pena por el delito que pudiere cometer o haya cometido. Se le impondrá de 6 meses a 6 años y hasta 200 días de multa ($10,000 pesos).
Artículo 248.- Cuando se ejecuten uno o más delitos por pandilla se aplicará a los que intervengan en su comisión, además de las sanciones que les correspondan por el o los delitos cometidos se le impondrá de 6 meses a 3 años.
El bando de policía del municipio de Tijuana, B.C. Aplica el artículo 88.- Escribir leyendas o fijar anuncios de cualquier clase, en fachadas, bardas, banquetas, parques, plazas, calles o cualquier bien público, sin el permiso de la autoridad municipal.
Artículo 89.- pegar, colocar, rayar, pintar, escribir nombres, leyendas o dibujos en la vía pública, lugares de uso común, edificaciones públicas o privadas, sin contar con el permiso de la autoridad municipal o de la persona que pueda otorgarlo conforme a la ley.
Artículo 90.- Pegar, colocar, rayar o pintar por sí mismo o por interpósita persona, leyendas o dibujos que hagan apología del delito, la drogadicción o atenten contra la moral pública.
Artículo 91.- vender o proporcionar a menores de edad pintura en aerosol.

Entrevistas graffiteros de Tijuana:
Robs.
¿Qué es graffiti?
R: Es un movimiento de pintura en aerosol y en su contenido encontramos tipografías.
¿Por qué hacer graffiti?
R: Me gusta, yo lo hago para mí, unos pintamos por que nos pagan, pero más es por gusto. Me interesa la caligrafía, la tipografía, la pintura. Como artista, la pintura en aerosol es para mí un instrumento más para realizar mi obra, como lo es el óleo.
¿Cuáles son las herramientas para hacer graffiti?
R: El aerosol (que en la actualidad se fabrica spray con pintura de calidad específica para graffiti con una gama de colores muy amplia) , los tapones, que hay desde punto fino hasta grosores de cinco a diez dedos (cuando antes sólo había de dos tipos de tapones), rodillos y pintura en baldes también para fondear. Plumones que ya son específicos para el graffiti, hay para rayar en vidrio, en fin ya hay bastante mercancía destinada para hacer graffiti.
¿Explica como es el proceso creativo en el graffiti?
R: En el caso del ilegal es cuestión de unos minutos, hago un trazo rápido, como si estuviera dibujando, con un spray que tenga un tapón de punto fino, el spray puede ser de baja calidad y que sea de un color claro; después cambio a un tapón de punto grueso para rellenar y fondear la pieza de acuerdo a la combinación de colores que requiera y en seguida vuelvo al tapón de punto fino, delineo y recorto de nuevo con un tapón de punto grueso y lo que resta es afinar detalles. En el caso del legal básicamente es el mismo proceso. La diferencia entre legal e ilegal es el tiempo, cuando es graffiti legal cuento con un boceto ya estructurado, ya cuentas con un permiso y puedes tomarte el tiempo de observar la pieza con detenimiento desde diferentes ángulos y distancias para presentar una pieza más elaborada.
¿Cómo te inicias en el graffiti?
R: Ya lo había visto cuando estaba en la primaria, pero, me interesó desde segundo de secundaria con otras personas ya más grandes que rayaban. Siempre me ha interesado el dibujo, le intente y luego saque mi sobrenombre influenciado por los tagers de esa época haciendo ilegal, al poco tiempo me di cuenta de que lo que valía la pena era hacer piezas, no estaba informado. Luego entré a la preparatoria y me tope con que la mayoría de mi salón rayaba, éramos tagers nada más.
¿Qué es el tag?
R: El tag son las firmas. No hay graffitero que no tenga firma, un graffitero para hacer piezas primero tuvo que empezar por hacer tags.
¿Cómo es el fenómeno del graffiti en Tijuana?
R: Cuando yo empecé fue en el 96, ya se hacían letras grandes. El nivel de San Diego al de Tijuana se me hacia similar, del 97 al 99 fue de lo mejor porque no había tanto legal. En el 2000 fue cuando surgió esta enfermedad de los “trepes”(son listas de firmas que quedan plasmadas en lugares de difícil acceso, por lo regular son sitios de altura que hace que sean muy visibles) que duraría cuatro años, en ese tiempo yo pienso que el movimiento estaba apagado, casi todo lo que se hacía era puro vandalismo, eso no era graffiti, incluso otras ciudades de la república se burlaban de Tijuana, cuando antes había sido referencia del graffiti en el país, en esos años Tijuana se estancó y los demás sobresalían.
A raíz de esa enfermedad, muchos tagers que eran buenos dejaron de hacerlo, porque, se empezó a calentar con la policía, la gente se empezó a molestar, ya no era lo mismo que antes, ni siquiera estaba en el código penal, ahora creo que son de 3 a 6 años de cárcel. Pero se acabó como en el 2005, todavía sigue pero yo pienso que de un 100 % de la gente que raya, un 20 % hace trepes. Yo creo que se empezaron a informar y surgieron más crew´s, tagers buenos, ahora, podemos ver una amplia galería de piezas por toda la ciudad.
¿Cuáles son las características del graffiti legal e ilegal?
R: El graffiti ilegal es el más suave, el que más se destaca por que de ahí viene, siempre cargo en mi bolsa algo, por ejemplo, plumones. El graffiti siempre ha sido ilegal y es ir a un sitio conocido que este a la vista o también puede no estar a la vista y simplemente pones tus letras o tu pieza sin el permiso de nadie. Evito pintar casas, escuelas o iglesias prefiero ir a un callejón o intervenir algo más urbano.
El legal es cuando ya nos dieron algún permiso de la autoridad o de alguna persona que le surgió el interés de pintar su casa, un local o para alguna pared. Cuando es legal trato de que sea un tema más especifico, más complejo con una calidad más establecida, más procesado e investigado.
¿Qué opinas sobre el graffiti en las galerías de arte?
Es muy vendido y si fuera más reconocido el graffiti, tiene mucho que aportar al arte. Muchos artistas tienen la mentalidad tonta de decir todavía que el graffiti es vandalismo. Si el graffiti estuviera más reconocido como una tendencia de la pintura daría mejor resultado.

[1] Valenzuela Arce, José Manuel, “la construcción sociocultural de los espacios públicos”, Yard, Sally, tiempo privado en espacio publico, insite 97, conaculta, installation gallery, San Diego, 1998, pp.168.
[2] Valenzuela Arce, José Manuel, “la construcción sociocultural de los espacios públicos”, Yard, Sally, tiempo privado en espacio publico, insite 97, conaculta, installation gallery, San Diego, 1998, pp.168.
[3] Valenzuela Arce, José Manuel, “la construcción sociocultural de los espacios públicos”, Yard, Sally, tiempo privado en espacio publico, insite 97, conaculta, installation gallery, San Diego, 1998, pp.166, 164.
[4] Valenzuela Arce, José Manuel, “la construcción sociocultural de los espacios públicos”, Yard, Sally, tiempo privado en espacio publico, insite 97, conaculta, installation gallery, San Diego, 1998, pp.166.
[5] Joselit, David, fugitive sites, insite 2000-2001, México, Offset Rebosán, 2002. pp. 181.

6 comentarios:

  1. Muy bien Vladimir, has abordado un tema que dejamos pendiente de revisar en clase. Es un tema, sin duda importante por todas sus implicaciones y sobre todo porque es una realidad inobjetable a la que debemos aprender a mirar desde otras perspectivas y dejar de desestimar su valor artístico. Como ejemplo de contracultura cumple su cometido también, no obstante, la invasión de una propiedad privada seguirá siendo siempre el pretexto para su intolerancia. Creo que el tema merece trabajarse más, ahondar en los antecedentes en TJ, entrevistar a otros exponentes, en fin, de igual forma revisar con rigor la estructura escritural.
    Felicidades
    Roberto Rosique

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  2. el graffiti en tijuana tengo entedido que empezó a fines de los 80s. Yo soy de Tijuana y tambien lo recuerdo a partir de 1992, que fue cuando empecé a ver con atencion los tags que ya se plasmaban por toda la ciudad. Hoy en dia se dice que el crew HEM (que aun existe), es el pionero del graffiti en Tijuana y México, aunque no comparto al 100% ezsa idea, ya que tengo entendido que en esas épocas ya existian otros crews. A principios de los 90s hubo muchos crews en Tijuana, provenientes de San Diego y otras ciudades de Estados Unidos (AFL, EV, CFK, HCM, NCT, entre otros). Tambien existieron muchos barrios, como hasta hoy, pero se han caracterizado por mantener un estilo muy arraigado y poco evolutivo, pero con escencia muy familiar.
    En 1994 ya existian muchos crews propios de Tijuana, con graffiteros que ya procuraban cierta variedad de estilos e sus tags o piezas. Los trepes ya existian desde entnces. tal sea el caso de "sueño", un graffitero que en 1993 se subió a poner su tag a la garita internacional de San Ysidro, junto con kenos, poniendo la leyenda "sueño kenos hem".
    Pero no fue hasta 1996 cuando se dio el llamado "boom" del graffiti en Tijuana. En este año el graffiti se propagó de manera increible, surgieron tagers con la idea de graffitear toda la ciudad. Algunos lo hicieron (patron, brown, jefe, tufe, owex, mero, etc.).
    En 1997 la autoridad decidió penalizar el graffiti. A partir de este año disminuyó la actividad del graff.
    El estilo propio de aplicar el graffiti que se podría decir que tiene nuestra ciudad es el de rayar sobre edficios públicos o privados. esta forma la aplicó en un magnitud un graffitero que surgió en 1999, denominado "sfume" con su crew ATS. Este se caracterizó por el estilo tan peculiar que manejaba y sore todo por la gran cantidad de listas y tags que dejó a lo largo de la ciudad. Este tagger fue una gran influencia para otros que se han dedicado ha hacer "trepes".
    ..............
    Esto es algo de lo que les puedo contar sobre lo que para mí es "la vieja escuela" del graffiti en Tijuana.

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  3. WOW No le entendi mucho pero se ve que saben bastante!!!

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